Cómo preparar tu caldera para el invierno

¿Quieres disfrutar de un hogar cálido y confortable este próximo invierno? ¿No quieres sorpresas ni gastos imprevistos? Para ello debes hacer una puesta a punto de tu sistema de calefacción. Aquí te contamos cómo preparar tu caldera para el invierno.

Si no la mantienes correctamente, corres el riesgo de sufrir averías sorpresa, garantías anuladas o tener que reemplazar la caldera antes de que sea absolutamente necesario.

Para garantizar que tu caldera funcione de manera segura y eficiente, revisaremos cinco puntos necesarios, que puedes hacer tú mismo, para preparar tu caldera de cara a la larga temporada de invierno:

  • Enciénde tu caldera antes de que comience el invierno
  • Comprueba si hay fugas, códigos de error o ruidos inusuales.
  • Limpia el área alrededor de tu caldera.
  • Instala un detector de monóxido de carbono.
  • Programa el mantenimiento anual de la caldera.

Con una preparación mínima, puedes tener la tranquilidad de saber que tu caldera funcionará correctamente, no sólo este invierno sino durante muchos años más.

Enciende tu caldera antes de que comience el invierno

Contenidos

Incluso si todavía hace calor fuera y no quieres encender la calefacción, es aconsejable encender la caldera para una “prueba de funcionamiento”. Alrededor de 15 minutos serán suficientes.

De esta manera podrás identificar cualquier problema con el sistema de presión de tu caldera. Las calderas dependen de un flujo equilibrado de presión de aire y agua. Pero después de un largo periodo de inactividad (como en verano), es normal que la presión de tu caldera baje. Cuando esto sucede, tu caldera no puede calentar agua con tanta eficiencia. O peor aún, nada en absoluto.

La buena noticia es que regulando el manómetro de presión puedes solucionar este tipo de probemas fácilmente. Si la caldera está inactiva es porque el manómetro de presión baja a menos de 0.5 bares. Para esto, es necesario subir la presión abriendo la llave y volviéndola a cerrar cuando la caldera alcance la presión correcta. Si el problema persiste, es posible que sea una fuga. Es posible que necesites ajustar los niveles de agua y el manómetro, especialmente si purgaste los radiadores en primavera.

Comprueba si hay fugas, códigos de error o ruidos inusuales

¿Otra buena razón para realizar una prueba de funcionamiento de la caldera? Es aconsejable inspeccionar en busca de fugas, códigos de error o ruidos inusuales.

FUGAS

Si la presión de tu caldera ha bajado significativamente y no se soluciona ajustando el manómetro, es posible que tengas una fuga de agua. Busca agua acumulada o puntos húmedos alrededor de los radiadores y la caldera. Si notas algo fuera de lo común, programa una visita con un técnico de reparación de calderas cualificado, como los que encontrarás en Instalaciones Madrid Clima.

CÓDIGOS DE ERROR

Las calderas más nuevas disponen de pantallas que indican la temperatura, los niveles de presión y cualquier problema que sufra la caldera. Si es tu caso, asegúrate de revisarla para detectar cualquier error o código de falla. Por ejemplo, si el piloto se apagó, la pantalla te informará que es necesario volver a encenderlo.

RUIDOS INUSUALES

No es raro que las calderas emitan silbidos, estallidos, crujidos o incluso golpes fuertes. Cuando tienes depósitos minerales naturales en el agua que se acumulan dentro del tanque, crean una capa gruesa de sedimento que atrapa el agua hirviendo. El agua, que intenta escapar de la acumulación, produce varios ruidos inusuales. Si escuchas estos sonidos, llama a un técnico para que lave tu caldera .

Limpia el área que rodea tu caldera

Cuando esté en uso, el área que rodea la caldera debe permanecer libre de obstáculos. Si has estado almacenando productos de limpieza, cajas u otros artículos  de comunes de almacenamiento cerca de tu caldera, asegúrate de retirarlos antes de encenderla para el invierno.

A su vez, revisa que las salidas de aire de entrada tampoco estén obstruidas y limpias de polvo, suciedad o pelo que pueda haberse acumulado en primavera y verano.

Manten tu caldera y radiadores limpios y sin obstrucciones

Instala un detector de monóxido de carbono

Si tienes una caldera de gas, debes tener un detector de monóxido de carbono colocado cerca de la caldera.

Durante el proceso de combustión, el intercambiador de calor de tu caldera emitirá vapores venenosos, incluido monóxido de carbono (un gas inodoro que puede ser mortal si se inhala).

Por ley, todas las calderas de gas deben tener una ventilación adecuada. Pero en caso de una fuga, no querrás correr el riesgo de sufrir un envenenamiento accidental.

Incluso si ya tienes un detector de CO instalado, debes verificar cada cierto tiempo si es necesario cambiarle la batería. Unos pocos minutos de tu tiempo pueden mantener tu hogar seguro.

Programa un mantenimiento anual de tu caldera: la forma más cómoda para preparar tu caldera para el invierno

Sin lugar a dudas, la mejor manera de preparar tu caldera para el invierno es programar una puesta a punto de la caldera.

Nuestros técnicos cualificados pueden pueden detectar problemas menores antes de que provoquen reparaciones importantes en el futuro. ¿Más razones aún?: Mantendrás válida la garantía de tu caldera (la mayoría de los fabricantes requieren mantenimiento anual), lo que te ayudará a ahorrar en las reparaciones necesarias y mejorar la eficiencia de tu caldera, ahorrándote dinero en facturas de energía.

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